El pasado 20 de mayo Aagesen ya avanzó que se estaba "priorizando" la variable de la sobretensión dentro de la investigación que se estaba llevando a cabo sobre el origen del cero eléctrico, si bien indicó que, dado cómo funciona el sistema eléctrico, no iba a ser "una única causa" la responsable del apagón. "Va a haber más, con seguridad. Va a haber responsabilidades múltiples y varias causas. Tendremos que ver si hay varias responsabilidades o solo hay una responsabilidad. Pero insisto, hasta que no sepamos esas causas no podemos dirimir esas responsabilidades", aseguró entonces.
La ministra explicó que la sobretensión es "una modificación de un parámetro fundamental de la red, que se puede deber a un conjunto de causas (...). Por lo tanto, estamos viendo el cúmulo de factores, qué es causa y qué es consecuencia, me parece fundamental", dijo.
Lo que sí que dejó claro Aagesen es que el motivo del colapso del sistema eléctrico peninsular no fue debido a un problema de demanda, ya que el mallado existente está concebido para demandas superiores a 40 gigavatios (GW) y ese día era de unos 25 GW.
No obstante, reconoció que el sistema está funcionando desde entonces reforzado por las restricciones técnicas, con el objetivo de que esté cubierto y no vuelva a pasar un incidente como el del 28 de abril.
"Es como poner un antibiótico de amplio espectro, sabiendo que el paciente tiene algo. Entonces evita que le pueda volver a pasar. Y por otro lado, nosotros estamos identificando las causas para poner las medidas y que no vuelva a ocurrir algo así", ha comentado en declaraciones en Onda Cero recogidas por Europa Press.
¿Por qué fallaron los cortafuegos?
Por ello, aseguró que la investigación del comité estaba centrada en ver "quién originó o qué tipo de actuaciones" llevaron a esa sobretensión, y en conocer el motivo por el que los cortafuegos no saltaron.
"Tenemos que ver si ha habido un problema a la hora de aplicar los cortafuegos. Hemos tenido eventos en el pasado y se han quedado aislados", indicó, subrayando que el sistema eléctrico español está preparado para operar bajo el concepto N-1 (ene menos uno), casuística según la cual si un elemento fundamental falla, hay otro que le sustituye automáticamente.
En el caso concreto de los cortafuegos, la ministra señaló en su momento que habrá que ver "muchas responsabilidades", desde el operador del sistema, Red Eléctrica, hasta cada uno de los actores: generadores (Endesa, Iberdrola, Naturgy, Repsol, etcétera) y distribuidores eléctricos (Endesa, Iberdrola, Naturgy y EDP son los cuatro principales).
Aagesen insistió en descartar la opción de un ciberataque al operador del sistema -Red Eléctrica-, aunque no cerró del todo la posibilidad de que se dieran en otros puntos de la red, como la treintena de centros de control existentes en el país.