La máxima responsable del BEI, la socialista Nadia Calviño, ha dicho este lunes, en el marco de los Desayunos del Ateneo de Madrid, que Europa "no puede seguir dependiendo de otras jurisdicciones" en temas como energía o chips y que tiene que operar desde un prisma europeo, lo que incluye la seguridad. En ese marco, ha adelantado que los 250.000 millones de euros que prestará su Banco hasta 2027 para inteligencia artificial (IA), infraestructuras militares, materias primas críticas o transición verde permitirán financiar "1.000 campeones europeos adicionales que se unirán a los 3.000 actuales" (la European Tech Champions Initiative es el "fondo de fondos impulsado por la Unión Europea y los Estados Miembros participantes para fomentar el crecimiento de startups tecnológicas punteras con alto potencial de crecimiento, scale ups"). En todo caso, la presidenta del BEI ha abogado por racionalizar el gasto militar y por abordar de manera común los controles de exportación e importación de armas, máxime si se pretende contar con una política unificada de defensa. Calviño cree en ese sentido que es posible cooperar con países estrechamente vinculados al club comunitario, como Reino Unido o Suiza.
Calviño ha reconocido que el BEI ha pasado de contar con una presencia "testimonial" en cuestiones de defensa a involucrarse en instalaciones militares, programas de I+D y a apoyar fondos de inversión o pymes del sector.
Los 600.000 millones de euros de balance del BEI y su calificación crediticia de AAA situarían al organismo en una posición "única" para contribuir a la transformación del continente ante la conformación de un "nuevo orden mundial". No obstante, la exministra de Economía ha resuelto que el viraje hacia la defensa se ejecutará sin renunciar a seguir siendo el "banco del clima".
Por otro lado, la presidenta del Banco paneuropeo ha revelado que, en este momento, no se está financiando ninguna planta nuclear de nueva construcción, aunque sí proyectos de tecnologías y combustibles nucleares. Calviño también ha reconocido que su Banco está apoyando proyectos vinculados a las energías fósiles, como gasoductos, pero en tanto en cuanto pueden reutilizarse para transportar hidrógeno verde.
El Banco Europeo de Inversiones (BEI), que es de titularidad conjunta de los países de la UE, tiene los objetivos siguientes: (1) impulsar el potencial de crecimiento y empleo de Europa; (2) apoyar las medidas dirigidas a mitigar el cambio climático; y (3) fomentar las políticas de la UE en países no pertenecientes a la Unión Europea. Todos los países de la UE son accionistas del BEI.
